El Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Universitario de Torrejón, perteneciente a la red pública de la Comunidad de Madrid, ha incorporado la cirugía endoscópica a las intervenciones de columna para tratar patologías de columna, tales como las hernias discales, la estenosis de canal o la estenosis foraminal, con un procedimiento menos invasivo que facilita la recuperación del paciente y reduce las complicaciones.
Esta técnica quirúrgica ofrece a los pacientes una alternativa efectiva y menos invasiva para tratar ciertas patologías de columna mediante un abordaje mínimo.
A través de pequeñas incisiones, el servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología introduce un endoscopio que cuenta con una cámara de alta definición para acceder a la columna vertebral y tratar la patología a través de la imagen en un monitor.
Esta técnica ofrece numerosos beneficios frente a la cirugía tradicional abierta, como un menor tiempo de recuperación, la reducción de traumatismos de los tejidos musculares, disminución de probabilidades de infección, un mínimo dolor postquirúrgico, mejor resultado estético y menor consumo de analgésicos. Además, influye muy positivamente en una rápida mejoría de la movilidad y de las funciones físicas.
“Gracias a la incorporación de esta técnica, podemos ofrecer este servicio a más pacientes para abordar con garantías la patología de columna, reduciendo al máximo las limitaciones que puede suponer una intervención abierta de columna”, valora el Dr. Paulino Sánchez, Jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Universitario de Torrejón.
“Podemos extraer el disco dañado o liberar una estenosis de canal o de un receso mediante pequeñas incisiones de un centímetro, reduciendo el riesgo asociado a la cirugía abierta y consiguiendo una recuperación más rápida de los pacientes que se someten a esta intervención”, explica el Dr. Miguel Á. García, Traumatólogo de la Unidad de Columna.
Además, la cirugía endoscópica de columna permite actuar con precisión sin afectar a los tejidos sanos circundantes, preservando la musculatura, los ligamentos y las estructuras que dan estabilidad a la columna vertebral.
“Es una intervención idónea para pacientes seleccionados en los que, por su patología, se puede aplicar este tipo de intervención y evitar una cirugía abierta”, concluye el doctor Sánchez.