En la madrugada del miércoles al jueves, los servicios de emergencias tuvieron que atender a 11 personas por inhalación de humo tras declararse un incendio en un cuarto piso del número 69 de la calle Cañada de Torrejón de Ardoz.
Seis de las víctimas fueron trasladadas a un centro hospitalario, dos de ellas están en la UCI (las dos personas que vivían en el domicilio) y otra de las afectadas fue Raquel Uzquiano, vecina del quinto piso.
Su piso está justo encima de la vivienda incendiada, por lo que ha sido una de las vecinas más afectadas por el fuego. Diario de Torrejón habla con Raquel Uzquiano para conocer cómo vivió el dramático episodio.
«Eran sobre las 00:20 de la madrugada, mi marido estaba en el salón viendo la televisión y yo me acababa de acostar. Dejé la ventana un poco abierta y entraba humo, empecé a oír explosiones y me asomé a la ventana y veía el fuego en mi terraza. Estaban subiendo las llamas hasta mi piso y salí corriendo gritándole a mi marido: ‘¡Hay fuego!’. Y él subió la persiana para verlo, comprobamos que sí había un incendio e, inmediatamente, cerramos todas las persianas, cogimos las llaves y el móvil y nos bajamos a la calle», relata un poco afectada.
«Nos ahogábamos»
La vecina sigue relatando cómo transcurrieron los hechos hasta que pudieron bajar por las escaleras los cinco pisos que les separan de la calle. «Mi casa estaba llena de humo, no veíamos nada, mientras bajábamos las escalera nos íbamos ahogando. En el segundo piso no podíamos más e íbamos casi a rastras porque nos faltaba el aire y no podíamos», continúa.
Cuando, al fin, llegaron a la calle, fueron atendidos por los servicios sanitarios y por la Policía. «Nos trajeron agua y sábanas y nos atendieron muy bien», puntualiza Raquel. «Vinieron los Bomberos y estuvieron apagando el fuego del piso de abajo. A mí me pidieron la llave de mi casa porque iban a subir ellos primero y, una vez, dentro, abrieron todas las ventanas», prosigue la entrevistada.
Raquel nos explica que había tanto humo dentro de su casa que llegó a pensar que estaba ardiendo también. Cuando los Bomberos bajaron a la calle para hablar con Raquel y su marido les comunicaron que no podían pasar esa noche ahí porque había mucho humo y partículas contaminantes, así que de 4:00 a 07:00 horas estuvieron en casa de su hija.
«El humo deshizo las cortinas de mi casa»
El incendio ha provocado serios daños en la casa de Raquel. «Se me ha quemado el aire acondicionado, la ropa que tenía tendida, las persianas, tengo el salón negro del humo y las cortinas se me han deshecho, el sillón también está hecho una pena. Pero todo del propio humo, no se quemó nada», apunta la afectada.
Raquel se puso este jueves en contacto con su seguro y ayer iban a ir a mirar los desperfectos y está actualmente a la espera. «Se llevaron a 11 personas al hospital y el matrimonio que vive en el piso que se ha incendiado están en la UCI, pero sus hijos se encuentran bien», señala.
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