El 23 de noviembre, la biblioteca Gabriel Celaya acoge a las 19:00 horas la presentación de los libros de tres autores locales.
Serán Sandra Robles, con ‘Yo también te quiero’; Paula Mateos, quien presentará ‘Mamá quiero ser cuentista’; y María Ángeles Saavedra, que presentará ‘Desde que nos encontramos’.
‘Yo también te quiero’
Elizabeth Bennington está enamorada de William Spencer desde que el mundo es mundo. Se conocen desde la infancia y, prácticamente, se han criado juntos. Viaja con ellos hasta lo más profundo de sus corazones, en su camino individual por aprender a entender, aceptar y expresar sus sentimientos.
Ubicado en la Inglaterra de la incomparable Jane Austen, la autora ha querido hacerle un pequeño y modesto homenaje desde la admiración a toda su magnífica obra.
‘Mamá quiero ser cuentista’
Mamá, quiero ser cuentista es un grito a todo lo injusto desde los sueños de una niña de treinta y ocho años que ha crecido escribiendo todo lo que le llamaba la atención.
Mamá, quiero ser cuentista son estrellas de mar, detergente, gordofobia, feminismo, Ana Rosa Quintana, animales, nazis, laca Nelly y vermú.
Mamá, quiero ser cuentista viaja por el pasado, presente y futuro —distópico en la mayoría de las ocasiones— de un mundo que ha sufrido dos guerras mundiales, un Holocausto, una España dictatorial y una Argentina que buscaba desaparecidos. Un bingo con pederastas, sufragistas, maltratadores, maricas y bragas de encaje.
Mamá, quiero ser cuentista son más que cuentos; son entrañas, vísceras, lágrimas, risas y dolor. Es una verbena en la que todo puede pasar y pasa. Y a la que todo el mundo está invitado, o no.
‘Desde que nos encontramos’
Nunca había amado así. Nunca tan bonito, tan sencillo, tan suave, tan feliz. Tuve un amor de mi muerte al que le dediqué mi primer poemario titulado Permíteme inmortalizarte. Ahora, con mi segundo poemario Desde que nos encontramos, hablo de mi renacer, del amor de mi vida, de ese que solo era posible encontrarlo con fe y con el que comencé a vivir y a conocer la felicidad verdadera. Este nuevo poemario es fruto del trabajo de cuatro años escribiendo nuevas poesías. Ya no hay desamor, aquí solo hay abrazos.
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