La Guardia Civil ha investigado a dos personas por circular a velocidad excesiva por encima de los 200 kilómetros por hora, grabarse mientras conducían y publicarlo en redes sociales. Ambos investigados superaron en más de 80 km/h la velocidad establecida en vías interurbanas, cometiendo un delito contra la seguridad vial.
Por otro lado, en la provincia de Valladolid, la Guardia Civil detectó un vehículo en la A62 que circulaba sin rueda delantera derecha y sin neumático trasero derecho, chocando repetidamente con la valla metálica de protección lateral.
En moto a 257 km/h
En este caso, el conductor colgó un vídeo en redes sociales donde se observaba una motocicleta de gran cilindrada con la leyenda “la vida es corta”. Posteriormente, en otra toma grabada en primera persona, se ve cómo acelera desde los 251 hasta los 257 kilómetros por hora, con la frase “cómprate una moto y hazla aún más corta”.
El infractor circulaba por la carretera M-45 a la altura del término municipal de San Fernando de Henares, en una zona donde la velocidad máxima está limitada a 120 kilómetros por hora.
Tras analizar el vídeo, los agentes de la Guardia Civil del Sector de Tráfico de Madrid lograron identificar al conductor del vehículo, un hombre de 23 años vecino de Torrejón de Ardoz.
A 209 km/h en un tramo de 80
El otro conductor, un varón de 19 años, circuló a 209 kilómetros por hora de noche por un tramo de la carretera M-14, dentro del término municipal de Madrid, que tiene una limitación específica de velocidad máxima permitida de 80 km/h. Además de conducir a esta velocidad poniendo en peligro al resto de usuarios de la vía, el infractor lo hizo mientras sujetaba con una de sus manos un móvil con el que grabó la conducción y el propio medidor de velocidad, donde se aprecia el cambio desde los 157 hasta los 209 km/h.
Ambas conductas son constitutivas de un delito contra la seguridad vial, tipificadas en el artículo 379 del Código Penal que estipula que “el que condujere un vehículo de motor o un ciclomotor a velocidad superior en 80 km/h en vía interurbana a la permitida reglamentariamente, puede ser castigada con la pena de prisión de 3 a 6 meses, o con la de multa de 6 a 12 meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta 4 años”.
33 kilómetros circulando sin ruedas bajo los efectos de alcohol y drogas
En Valladolid, la Guardia Civil ha detenido a un hombre de 49 años, por los supuestos delitos de conducción temeraria, conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas y/o drogas (sintomatología), negativa a someterse a las pruebas de detección de alcohol y drogas y atentado Agente de la Autoridad
La madrugada del pasado día 19 de febrero de 2023, cuando una patrulla de la ARS de la Guardia Civil de León prestaba sus servicios en la provincia de Valladolid, detectó en la autovía A-62 sobre el km 126 sentido Burgos, un turismo circulando dando bandazos, sin rueda delantera derecha y sin neumático trasero derecho, chocando de forma repetida con la valla metálica de protección lateral y creando un grave riesgo a su persona, así como al resto de usuarios de la vía.
Con el apoyo de varias patrullas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Valladolid, interceptaron el vehículo y lo escoltaron hasta lograr detenerlo.
Una vez detenido el vehículo, se procede a identificar al conductor del mismo, encontrándolo inmóvil y con unas gafas de sol puestas. Al no poder abrir la puerta y ante la posibilidad de que el conductor hubiera sufrido algún problema de salud, se rompe el cristal de la ventanilla, momento en el que el conductor reacciona de forma hostil hacia los agentes, negándose a salir del vehículo y agrede a uno de los guardias civiles dando patadas y puñetazos, por lo que se procede a su reducción y detención.
Ante los indicios de que pudiera encontrarse bajo la influencia de alcohol, drogas o estupefacientes, y negándose a realizar las pruebas de detección legalmente establecidas, se trasladó a dependencias policiales.
Durante el traslado, ocasionó daños al vehículo oficial, así como autolesiones, por lo que se solicitó la presencia de personal sanitario para administrarle el tratamiento adecuado, y fue trasladado al Hospital Río Carrión de la localidad de Palencia.